Se acaba el 2016, el año de nuestro décimo aniversario. Ha sido espectacular. Ha sido el año en el que hemos hecho más bolos, y en el que hemos celebrado estos diez años con dos auténticos Trogloditas: Taker y Liba.

Sabino estuvo a punto de venir al concierto de septiembre en la sala Sarau. Ensayó un par de veces con nosotros para el bolo, y al final por compromisos de trabajo no pudo estar, pero mantenemos el contacto con él y esperamos que surjan otras oportunidades.

A lo largo de estos diez años hemos vivido momentos increíbles para unos fans de Loquillo y Trogloditas. Cuando nos surgió la idea de montar la banda en 2006 era raro hacer un tributo a un grupo nacional, y así se lo explicamos al mismísimo Loquillo. Recuerdo aquel día cuando vimos entrar a Loquillo en el drugstore -por aquel entonces su sede social-, y Joan se armó de valor para decirle: "estoy cansado de tanto tributo a los Stones y a U2, ¿por qué no un tributo a Loquillo y Trogloditas?", y el Loco sonrió y nos dijo: "¿por qué no?, podéis hacer lo que queráis. Por mi no hay problema", y ahí empezó todo.

Posteriormente hablamos con Sabino, y la idea le pareció genial. Con Sabino hemos mantenido mayor contacto debido a que ensayamos en Moodfactory, y Julio -el propietario-, es un gran amigo de Sabino.

También recuerdo del día en que Jordi Vila hizo un comentario sobre un video nuestro en el que interpretábamos Avenida de la Luz. Fue un gran comentario, y nos hizo muchísima ilusión. Tanto con Jordi Vila como con Simón Ramírez hemos hablado alguna vez más y siempre han sido muy agradables con nosotros. Solo nos falta conocer a Ricard Puigdomènech, y esperamos que ese momento llegue algún día.

El objetivo de un tributo es gustar a la gente que quiere pasar un buen rato escuchando en directo su música preferida, y eso es la hostia. La gente te hace sentir estrella del rock and roll en esas dos horas de concierto, pero cuando acaba, vuelves a la normalidad y te das cuenta de que no eres estrella del rock. Pero lo que nadie nos puede quitar son los momentos que hemos vivido con nuestros ídolos tanto en el escenario como fuera de él. Quién me iba a decir a mí, que a mis catorce años flipaba con los solos de Taker, que lo tendría un día a mi lado en el escenario. O que ensayaría con Sabino Méndez y que él me pediría mi opinión sobre cómo interpretar sus canciones. O conocer a uno de los mejores saxofonistas de este país, que es el maestro Liba, y tenerlo a mi lado en el escenario.

Gracias a todos LOQUILLO Y TROGLODITAS por los momentos que nos habéis hecho vivir. Continuaremos haciéndoos nuestro homenaje, mientras nuestras mujeres e hijos/as nos dejen, jejejejejejeje. Gracias muy especiales a todos los que nos seguís, que muchos os habeis convertido ya en amigos, y os agradecemos muchisimo que nos dediqueis vuestro tiempo, y nos hagais sentir estrellas del Rock. Nos volvemos a ver en el 2017.

Toni Cuadrado